Ruta familiar corta que asciende a estos altos que dominan la localidad de Berbinzana. Las vistas del pueblo y de la vega del río Arga merecen la pena. Los repechos no son duros y la excursión se hace llevadera para todo el mundo.
Comenzamos el sendero local en Berbinzana, al fondo de la calle Camino del Calvario. Encontraremos, cuando salimos del casco urbano, y a la altura de una acequia y un gran desagüe protegido, el panel de inicio. Como en la mayoría de los senderos locales de la Zona Media que hemos visitado en los dos últimos años, los paneles se encuentran destruidos, descoloridos o arrancados, en definitiva, en mal estado. Desde que se creara la red de senderos en el año 2000 y se publicaran las topoguías el mantenimiento de los senderos ha dejado mucho que desear. En este caso el recorrido es realizable sin problemas, salvo en el paso en el que debemos abandonar la altiplanicie de los Altos y bajar al camino, donde no hay señalización y nos apoyaremos en nuestro GPS.
Una vez que hemos aparcado, avanzamos en línea recta por el camino de la Bajada (que tomaremos también en la vuelta) hasta llegar a una finca, vallada por setos o coníferas, donde un poste nos invita a girar a mano izquierda. Seguiremos entonces por la base de los Altos, pasando por varios establos y granjas y alguna casa aislada. En el tramo de las granjas el suelo se mostrará cementado hasta salir de la última explotación pecuaria. Giramos tras este último corral hacia el pinar, subiendo en paralelo a un prado vallado. Damos un par de amplias curvas por el paraje de Los Arienzos hasta que el sendero nos invita a subir decididamente la cuesta del pinar. Es un duro pero corto tramo (complicado para hacerlo en btt por el cascajo suelto del piso) hasta que alcanzamos la parte superior de los altos, formada por una terraza o altiplanicie sembrada, al lado norte y oeste y cortado hacia Berbinzana. Desde el punto más alto, marcado por una varilla en el suelo, tendremos fenomenales vistas de la localidad y de los campos de la vega del río Arga.
A partir de aquí deberemos rodear la altiplanicie sembrada por sus lindes en dirección oeste hasta llegar a un pequeño olivar que cae desparramado hacia un ramal del camino de la Bajada. Abandonamos el cómodo camino de concentración, que llanea unos cuantos kilómetros al sur, para bajar por una senda, sin marca alguna, entre el pinar y el olivar. Nuestro objetivo es un camino más claro que vemos y alcanzamos en unos 400 m.
Seguimos el camino claro hacia el norte hasta desembocar en el Camino de la Bajada, que nos llevará sin problemas de nuevo hasta el coche. En el punto de intersección un nuevo poste informativo nos facilita la orientación. En el último kilómetro, cuesta abajo, veremos a mano izquierda hasta dos pequeñas balsas con juncales y una zona embarrancada y erosionada que cae del paraje de La Calera. Alcanzamos de nuevo el punto de inicio a la altura de la finca vallada del inicio, en este caso poblada por almendros. Llegamos a la acequia principal, al desagüe vallado y a nuestro coche, junto al panel destruido.
MUNICIPIOS: Berbinzana
MAPAS PARA EL GPS: TopoNavarra y Caminos Balizados de Navarra |